Sagua no es cualquier Sagua, Sagua es Sagua la Grande.
Es como si, desde su génesis, hubiese estado marcada por la magnanimidad.
Hace 211 años que hace historia, y una historia no apacible, una historia digna de ser contada. Desde el epicentro, en el hoy parque La Independencia, creció, y con sus calles, con su urbanidad, fue pariendo hijos tan notorios tanto para ella como para el mundo entero.
Referencia en la urbanización, en la arquitectura, en el comercio, en las artes, en la cultura en general, y en la idolatría que sienten quienes la habitan, cual dama experimentada, se acicala en su cumpleaños y se niega al olvido, a pesar de las grietas, a pesar de los daños.
Felicitemos hoy a nuestra querida Sagua la Grande, y a quienes, con orgullo, somos sus hijos.
